Una argentina excepcional

María Eva Duarte de Perón, más conocida como Eva Perón o “Evita”, fue una actriz y política argentina. Nació el 7 de mayo de 1919, en Los Toldos, Argentina y falleció el 26 de julio de 1952, en la capital de su país natal, Buenos Aires. Se casó con Juan Domingo Perón  en 1945 y militó políticamente en el  Partido Justicialista. Evita, como el pueblo la bautizó, fue una figura que rompió todos los precedentes históricos y definió una modalidad política nunca vista en su país. Durante el breve período de su actuación, al lado de Perón, fue el centro de un creciente poder y se convirtió en el alma del movimiento peronista, en su esencia y en su voz.

Alrededor de la fecha y el lugar de nacimiento de Eva Perón existen controversias. Legalmente está registrada en Acta No. 728 del Registro Civil de Junín, como una niña que nació el 7 de mayo de 1919. Sin embargo, varios investigadores sostienen que este documento es falso, ya que fue realizado a instancias de la propia Eva Perón en 1945, para contraer matrimonio con el entonces Coronel  Perón. Hoy se acepta de modo prácticamente unánime que Evita realmente nació tres años antes, y fue bautizada como Eva María Ibarguren. En cuanto al lugar de nacimiento, algunos historiadores han escrito que erróneamente se señala que fue en el casco urbano de Los Toldos, pero se trata de una confusión, debido a que pocos años después de su llegada al mundo, la familia se instaló en el pueblo, en una casa ubicada  en la calle Francia (actual Eva Perón), que hoy es el Museo Municipal Solar Natal de María Eva Duarte de Perón.

Eva fue hija de Juan Duarte y Juana Ibarguren. Su padre (1858-1926), era conocido como “el vasco”,  un estanciero e importante político conservador de Chivilcoy, ciudad cercana a Los Toldos. Su madre, Juana Ibarguren (1894-1971), era hija de la puestera criolla Petrona Núñez y del carrero Joaquín Ibarguren. Aparentemente tenía poca relación con el pueblo, y por eso se sabe poco de ella. El padre de Eva, mantenía dos familias, una legítima en Chivilcoy con su esposa legal Adela D´Huart y sus seis hijos: Adelina, Catalina, Pedro, Magdalena, Eloísa y Susana; y otra ilegítima, en Los Toldos, con Juana Ibarguren.   Se trataba de una costumbre generalizada en el campo, para los hombres de clase alta, antes de los años cuarenta que aún es frecuente en algunas zonas rurales del país. Juntos tuvieron cinco hijos: Blanca (1908-2005), Elisa (1910-1967), Juan Ramón (1914-1953), Erminda Luján (1916-2012), y Eva María (1919-1952), quien vivió en el campo hasta 1926, fecha en la que el padre falleció y la familia quedó desprotegida y debieron abandonar la estancia en la que vivían. Estas circunstancias de su niñez, en las condiciones de discriminación de los primeros años del siglo XX, marcaron profundamente a Eva.

Al cumplir los 15 años de edad, Eva migró a Buenos Aires, donde se dedicó a la actuación, alcanzando renombre en el teatro, el radioteatro y el cine. En 1943 fue una de las fundadoras de la Asociación Radial Argentina (ARA), resultando electa presidenta de la misma al año siguiente. En 1944 conoció a Perón, entonces secretario de Estado del gobierno de facto, en un acto de recaudación de fondos para las víctimas del terremoto de San Juan. Casada con Perón, participó activamente en la campaña electoral de su marido en 1946, siendo la primera mujer argentina en hacerlo.

La obra social de una dama
Estando en el poder político como Primera Dama de Argentina, impulsó y logró la sanción, en 1947, de la Ley de Sufragio Femenino. Tras lograr la igualdad política entre los hombres y las mujeres, buscó luego la igualdad jurídica de los cónyuges y la patria potestad compartida con el artículo 39 de la Constitución de 1949. Ese mismo año fundó el Partido Peronista Femenino, que presidió hasta su muerte. Desarrolló una amplia acción social a través de la Fundación Eva Perón, dirigida a los grupos más pobres. A través de esa institución construyó hospitales, asilos, escuelas, impulsó el turismo social creando colonias de vacaciones, difundió el deporte entre los niños mediante campeonatos que abarcaron a toda la población, otorgó becas para estudiantes, ayudas para la vivienda y promocionó a la mujer en diversas facetas. Sin embargo, tal vez el eje principal de la popularidad  fue constituido en torno a los sindicalistas y a su facilidad y carisma para conectarse con las masas trabajadoras, a quienes ella llamaba sus descamisados.

En 1951, para las primeras elecciones presidenciales con sufragio universal, el movimiento obrero propuso a Evita, como candidata a vicepresidenta; sin embargo, ella renunció a la candidatura el 31 de agosto, día que todos recuerdan como “del Renunciamiento”, presionada por las luchas internas en el peronismo y la sociedad, ante la eventualidad de que una mujer apoyada por el sindicalismo pudiera llegar a vicepresidenta.

Eva Perón fallece el 26 de julio de 1952, a la edad de 33 años. Existen dos versiones sobre la causa de su muerte: Leucemia y Cáncer de útero. Su velatorio duró 14 días, el dolor popular se manifestó masivamente. Recibió honores oficiales, siendo velada en el Congreso de la Nación y en la central sindical CGT, con un reconocimiento multitudinario sin antecedentes en el país. Su cuerpo fue embalsamado y ubicado en la CGT. La dictadura cívico-militar, autodenominada Revolución Libertadora, secuestró y profanó su cadáver en 1955, ocultándolo durante dieciséis años.

En su legado figura la autoría de dos libros. “La razón de mi vida” (1951) y “Mi mensaje” (1952). Además, recibió numerosos honores, entre ellos, el título de Jefa Espiritual de la Nación, la distinción de Mujer del Bicentenario, la Gran Cruz de Honor de la Cruz Roja Argentina, la Distinción del Reconocimiento de Primera Categoría de la CGT, la Gran Medalla a la Lealtad Peronista en Grado Extraordinario y el Collar de la Orden del Libertador General San Martín, la máxima distinción argentina. Se han producido además numerosas películas, musicales, obras teatrales, novelas y composiciones musicales sobre la vida de Eva Duarte de Perón.

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