Por Carlos Jaramillo

Partiendo del principio de que la familia es la base de la sociedad y siguiendo con mi línea de activista Pro-familia, me atrevo por primera vez a escribir sobre este importante tema, del que muchos expertos hablan y escriben. He llegado a la conclusión que cuando un hombre y una mujer se casan y planifican tener una familia, lo menos que están pensando es en una separación por diferencias irreconciliables, pero eso sucede muy a menudo en las parejas actuales que tienen niños, es decir, una familia constituida. Dicha situación ni siquiera se piensa y sin embargo puede pasar cuando menos te lo esperas.

La foto ideal, como dicen los americanos “the perfect picture”, es que los niños crezcan bajo el mismo techo junto a papá y mamá, pero como bien sabemos, en altos porcentajes esto no ocurre, por lo que se hace necesario adaptarnos a dichas circunstancias de la mejor forma para que nuestros hijos crezcan sanos física y emocionalmente, tomando en consideración varios puntos que son comunes tanto para el padre como la madre.

Ambos padres quieren lo mejor para sus hijos, los aman y se preocupan por el bienestar de sus niños y por tales razones se debe empezar por no manipular a la ex pareja, ex esposo (a) con ellos, evitándole encuentros, visitas y paseos; hablando mal del otro, o diciendo las razones por las que se separaron en tonos que desmeritan o manchan la imagen del padre o de la madre frente a los pequeños. La situación se agrava más, si los niños no tienen edad de entender esas razones, y mucho menos comprender el por qué se les priva de la presencia de uno de los padres.

Se deben dejar a un lado los rencores o diferencias entre adultos ya que si aun estando separados se sigue con esa guerra fría de palabras o no se ha perdonado a la ex pareja o a si mismo, los niños se seguirán afectando al estar en medio de esa tensión que no les corresponde y que les marca la vida.

Recuerda que la separación de la pareja no es la separación de tus hijos, tu no te divorcias de tus pequeños y debes acostumbrarte a que tendrás que compartir muchas cosas con el padre o la madre de tus hijos como graduaciones, visitas al médico o emergencias, reuniones del colegio o paseos del colegio, fotos en fechas especiales y tantas otras ocasiones. Los niños siempre querrán ver a su papá y a su mamá en la misma fotografía, así que mi mejor recomendación es hacerte una limpieza con un buen ejercicio de perdón porque lo que se viene, o lo que te falta por vivir con los hijos es bastante y para el resto de la vida.

Insisto en la importancia de analizar cada caso de forma individual, debido a  que en cada familia hay variables muy peculiares que hacen a cada situación única y propia de cada núcleo familiar y no siempre lo que es bueno para unos es bueno para otros; depende de la madurez de los padres, de su compromiso por evolucionar y crecer. Hay una diversidad de situaciones que a la larga si se manejan bien y buscando ayuda (que bastante que hoy en día hay), podrán encontrar las herramientas para pilotear esta situación de vida que nos puede tocar algún día, Dios quiera que no.

Como Coach Empresarial y como padre y esposo separado, he querido tomar este tema muy en serio para influenciar familias, parejas, padres, madres e hijos para facilitarles este camino y ayudarlos a integrarse mejor dentro de sus distancias.

Carlos J. Jaramillo

http://www.carlosjjaramillo.com/home.html                                                                    carlos@carlosjjaramillo.com
Coach Empresarial con más de 20 años de experiencia en Colombia, Centroamérica y Estados Unidos.
Creador de la Conferencia-Taller «SIN MIEDOS» y la Conferencia “Como ser Exitoso venciendo tus Miedos”. Activista Pro familia / No al divorcio, si al perdón y a la tolerancia. Conferencista Motivacional.

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